En estos momentos los pollos se encuentran en los nidos con uno de sus progenitores al lado, siempre atento. En esta época del año el tiempo varía rápidamente, las temperaturas pueden cambiar mucho a lo largo de un mismo día. La lluvia en abril es un meteoro habitual y los pollos aún no pueden mojarse sin correr el riesgo de enfriarse fatalmente.
En esta época del año se notan mucho las diferencias en la edad de los pollos. Más adelante, no se apreciarán ya tanto los distintos tamaños y será el estado en el crecimiento de las plumas el indicador a tener en cuenta para calcular su edad. Estos dos pollos fueron fotografiados el mismo día en dos nidos contiguos, muy cerca de la cima del monte Txarlazo, allí donde construyeron el monumento a la Virgen de Orduña, tan acompañado ahora por antenas de todo tipo.
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