Otro río incipiente, el de San Miguel, unos pocos días al año surge de la ladera del monte Urieta, la cumbre más occidental de la sierra, y cae al valle de Angulo a través de la cascada de San Miguel, de 60 metros de caída, también junto a una lobera en ruinas y muy cerca del puerto de Angulo. La cascada de Peñaladros, rodeada de bosque autóctono, se precipita unos 13 metros junto al pueblo de Martijana, dentro del municipio burgalés de Valle de Mena, pero a sólo un kilómetro de territorio alavés. Al contrario que la cascada de Peñaladros, que tiene agua todo el año, hay otra, no menos espectacular, pero sí muy efímera, que se forma bajo el pportillo de La Barrerilla, entre los montes Iturrigorri y Bedarbide.
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